ES/730921 - Conversacion A - Bombay

His Divine Grace A.C. Bhaktivedanta Swami Prabhupāda



730921CN - Bombay, 21 septiembre 1973 - 4:47 minutos



Prabhupāda: Ahora él está allí también en Los Ángeles, nuestro Umāpati.

Brahmānanda: Oh, Umāpati. En Los Ángeles, sí. Lo vi cuando fui allí.

Prabhupāda: Sí, lo está haciendo bien allí. Ahora es gṛhastha. Tiene un trabajo en el Spiritual Sky. Él ahora está estable. El Spiritual Sky está haciendo algo, está proveyendo a tantos devotos gṛhasthas.

Gargamuni: Alguna actividad para que hagan.

Prabhupāda: Sí. Karandhara se las arregla muy bien, dándoles algún gasto pequeño. Y en lugar de alquilar en otro lugar, son inquilinos de nuestra casa. Así que tenemos inquilinos, pero no hay problemas con los inquilinos.

Devoto: Muy bien.

Prabhupāda: Ah. Cuando me sugirieron que comprara la casa, dije que: “No iba a tener problemas con los inquilinos. Eso es muy molesto”. Karandhara sugirió que: “Tenemos nuestros propios inquilinos. ¿Por qué deberían quedarse en otro apartamento? Si tenemos nuestra casa, se quedarán, y no habrá problemas”. “Oh, entonces está bien”. Necesitan una casa. Todos los gṛhasthas, tienen un apartamento separado, viviendo muy tranquilamente. De todos modos, cada uno de nosotros debe observar estrictamente los principios reglamentarios y servir sinceramente. Kṛṣṇa nos ayudará.

Gargamuni: En Calcuta nos estamos acercando a todas las bibliotecas. Al menos veinticinco bibliotecas han pedido sus libros, juegos completos.

'Prabhupāda: Como ves, a cualquier lugar nos podemos acercar. Vendí en Bombay, en todas las bibliotecas, mi anterior Bhāgavatam.

Gargamuni: Unos diez o doce libros, cada factura cuesta unas quinientas rupias por veinticinco. Eso es mucho.

Prabhupāda: No, eso es un respeto, si las bibliotecas y la escuela, las universidades, guardan nuestros libros.

Gargamuni: Algunos de ellos están sorprendidos. Fuimos a la Biblioteca Nacional de Calcuta. Es la biblioteca más grande. Vieron sus libros y dijeron: “Oh, ¿él está haciendo este trabajo?”. Estaban muy impresionados. Nunca habían visto el sánscrito o el bengalí impreso en el extranjero como usted lo ha hecho en sus libros. Dijeron: “Esto es fan...”. No hay nadie más que esté haciendo esto en la India, nadie. Muy impresionados. Y estos hombres son eruditos en sánscrito. Inmediatamente comenzó a leer. Dijo: “Oh, muy bien”. Dijo: “Está muy bien”. Estaba muy entusiasmado. Hay dos jóvenes que se pasan todo el día yendo a las bibliotecas.

Prabhupāda: Eso ha sido escrito por el profesor Dayal... Dimock que: “Los estudiosos del sánscrito deben tener una buena oportunidad, y nadie, creo, negará los estudios de Swāmījī”. Él ha dicho eso.

Gargamuni: Cualquier nombre que tengamos en la India, cualquier buen nombre que tengamos, se debe a usted.

Prabhupāda: (riendo) Se debe a Bhaktisiddhānta Sarasvatī Gosvāmī. Caitanya Mahāprabhu. Guru-kṛṣṇa-kṛpāya pāya bhakti-latā-bīja (CC Madhya 19.151). Puedes darme un masaje. Muchas gracias. Ahora tienes un trabajo de responsabilidad muy, muy grande. Yo moriré; tú vivirás. Kīrtir yasya sa jīvati (Cāṇakya Paṇḍita). Pero no voy a morir.

Tamāla Kṛṣṇa: No, no puede morir nunca. (risas)

Gargamuni: No podemos aceptar eso.

Prabhupāda: Hare Kṛṣṇa.

Gargamuni: Nos negamos a aceptarlo. (fin)