ES/740614 - Clase SB 02.01.06 - Paris

His Divine Grace A.C. Bhaktivedanta Swami Prabhupāda



740614SB - París, 14 junio 1974 - 26:01 minutos



******Documento pendiente de editar******


Nitāi: Oṁ namo bhagavate vāsudevāya. Oṁ namo bhagavate vāsudevāya. Oṁ namo bhagavate vāsudevāya. (los devotos repiten) (dirige el canto del verso, etc.)

etāvān sāṅkhya-yogābhyāṁ
sva-dharma-pariniṣṭhayā
janma-lābhaḥ paraḥ puṁsām
ante nārāyaṇa-smṛtiḥ
(SB 2.1.6)

etāvān—todos estos; sāṅkhya—conocimiento completo acerca de la materia y el espíritu; yogābhyām—conocimiento acerca del poder místico; sva-dharma—determinada ocupación obligatoria; pariniṣṭhayā—mediante la percepción plena; janma—nacimiento; lābhaḥ—ganancia; paraḥ—la suprema; puṁsām—de una persona; ante—al final; nārāyaṇa—la Personalidad de Dios; smṛtiḥ—recuerdo.

(pausa)

“La máxima perfección de la vida humana —ya sea que se logre mediante el conocimiento completo acerca de la materia y el espíritu, mediante el ejercicio de los poderes místicos o mediante el desempeño perfecto de la ocupación obligatoria— consiste en recordar a la Personalidad de Dios al final de la misma”.

Prabhupāda: Ante nārāyaṇa-smṛtiḥ (SB 2.1.6). Si puedes recordar a Nārāyaṇa, en el momento de la muerte, Nārāyaṇa o Kṛṣṇa, es lo mismo, entonces tu vida es un éxito, hagas lo que hagas. En Bengala hay un proverbio, bhajana kara sādhana kara mūrti jānle haya. Tal vez sean grandes espiritualistas, muy destacados o grandes yogīs, puedes ser algo grande, así que hagas lo que hagas, eso está bien, porque como dicen, “Todo conduce al Supremo, de una forma o de la otra”. Eso ya lo hemos explicado, sāṅkhya-yoga, karma-yoga, jñāna-yoga o dhyāna-yoga. Tantas cosas que han fabricado, y eso está bien. Y dices que, “Cualquier senda que sigamos, en última instancia todas nos llevan al mismo punto”. Eso está muy bien, siempre y cuando realmente vayas al mismo objetivo. De no ser así, te está desviando. Eso es lo que aquí se explica, “No importa, que tú digas que todos los caminos, conducen al mismo objetivo. Lo aceptamos”. Eso se explica aquí. Ante nārāyaṇa-smṛtiḥ (SB 2.1.6). Tú puedes haber hecho cosas muy buenas, pero si en el momento de la muerte, tu olvidas a Nārāyaṇa, entonces todo es inútil. Inútil.

Porque se trata de eso: cuál es tu mentalidad en el momento de la muerte. Si en ese momento, tu mentalidad es Nārāyaṇa, entonces tienes éxito; puedes aspirar al mundo espiritual y relacionarte con Nārāyaṇa. Alcanzas la perfección completa. Pero si en el momento de la muerte, piensas en tu perro, vas a nacer como un perro. Se acabo. Ahí se acaban todo tu sāṅkhya-yoga, tu filosofía y tu práctica de yoga, todo se va al infierno. Tu naces como perro. Se trata de esto. Entonces, a menos que practiques… ese es el punto, que uno tiene que recordar a Nārāyaṇa en el momento de la muerte, entonces ¿por qué no practicarlo directamente? Esta es la práctica. Tienes ahí a la Deidad, tienes allí la forma de Nārāyaṇa, o Kṛṣṇa. Si te dedicas siempre al servicio del Señor Kṛṣṇa, si llevas siempre en tu corazón la impresión de Kṛṣṇa. Y si continúas de una u otra forma, tu vida es un éxito. De no ser así, tantos bellos discursos, tanto apretarte la nariz y tanto ponerte cabeza abajo y… puedes hacer eso, puedes perder el tiempo de esa manera. Pero, ¿está garantizado que en el momento de tu muerte recordarás a Kṛṣṇa o Nārāyaṇa? Eso es lo que se necesita. Ante nārāyaṇa-smṛtiḥ, dice Śukadeva Gosvāmī, dice la autoridad. Así que este proverbio bengalí… bhajana kara sādhana kara mūrti jānle. Tu eres un gran trascendentalista. Practicas tantas cosas bonitas. Y eso está muy bien. ¿Pero sabes cómo morir? De eso se trata. Si tú mueres con conciencia de Dios, con conciencia de Kṛṣṇa, tu vida es un éxito.

(lectura del significado:) “Nārāyaṇa es la trascendental Personalidad de Dios más allá de la creación material”. Nārāyaṇa no es una persona… los māyāvādīs dicen: “Nārāyaṇa también es una persona como nosotros. Así que puedo recordar a cualquiera. Puedo recordar a mi esposa, puedo recordar a mi esposo o a mi hijo. Aun así, voy alcanzar el mismo objetivo”. No, no, no. No es así. Por eso, se dice en particular, ante ante nārāyaṇa-smṛtiḥ. No se trata de recordad a tu amigo o a otro semidiós u otro… no. Nārāyaṇa-smṛtiḥ. Entonces, “Todo lo que se crea, se mantiene y finalmente se aniquila se haya dentro de los límites del mahat-tattva, el principio material”. Todo. Ese… hay otro pasaje donde dice:

dharmaḥ svanuṣṭhitaḥ puṁsāṁ
viṣvaksena-kathāsu yaḥ
notpādayed ratiṁ yadi
śrama eva hi kevalam
(SB 1.2.8)

También se refiere a eso este verso, dice etāvān sāṅkhya-yogābhyām. Hay grandes sannyāsīs, que debaten acerca del Sāṅkhya yoga, la metafísica, analizan qué es el espíritu, qué es materia, neti neti: “Esto no”. Esto se llama Sāṅkhya yoga. Y Sāṅkhya yoga, el Sāṅkhya yoga original se refiere al bhakti-yoga. Porque la filosofía del sistema de Sāṅkhya yoga fue expuesta por Kapiladeva, el hijo de Devahūti. Es bhakti-yoga puro. Posteriormente, un ateo, que también asumió el nombre de Kapila y comento el Sāṅkhya yoga. Lo cual es un análisis materialista. El sistema de filosofía Sāṅkhya yoga es muy apreciado en Europa y los países occidentales porque es un sistema de metafísica, que analiza toda la manifestación cósmica. Hay veinticuatro tattvas. Es como estos cinco tattvas, elementos, materiales: tierra, agua, aire, fuego, éter. Después están los diez sentidos, hay cinco sentidos para adquirir conocimiento y hay cinco sentidos para disfrutar. Y cinco y cinco, diez. Y cinco elementos, quince. Luego los cinco principios del disfrute. Lo que se llama, tocar, oler, etc. De ese modo, hay veinticuatro elementos, y la mente, la inteligencia, el ego y el principal, el alma. De ese modo hay veinticuatro elementos. Los Sāṅkhya yogīs, analizan mucho este estudio. Son de la opinión de que además de estos veinticuatro elementos, no hay nada más. No. Si hay. Están los veinticuatro elementos, y esta, también quien los combina y aniquila, ese es el Señor Supremo, pradhāna, Viṣṇu.

Hay una historia muy interesante que nos contaba Satsvarūpa Mahārāja en Back to Godhead: El sabio erudito y el barquero. El barquero… en Bengala hay muchos ríos, por lo que la gente generalmente se transporta en barca. Y, una persona muy erudita de Calcuta dijo: iba a su casa en el pueblo en una barca y se sentía muy feliz, así que le preguntó al barquero: “Mi querido barquero, ¿sabes qué son las estrellas, que es la astronomía, cómo funcionan?”. “No, señor, no lo sé”. ”Oh, has perdido el veinticinco por ciento de tu vida. No sabes nada”. Luego, al cabo de un rato, volvió a preguntarle “¿Sabes geología, sabes cómo funcionan la tierra, el agua?” Él dijo: “No, señor, soy un pobre hombre. ¿Qué puedo saber?” ”Oh, has perdido el cincuenta por ciento de tu vida”. Entonces, de pronto, se formó una nube, una nube negra en el cielo, y se desato una tormenta. Entonces en ese momento fue el barquero quien preguntó: “Señor, ¿Sabes nadar?”. “No, no sé”. “Entonces ha perdido usted el cien por ciento de su vida. (Risas) Se va ha ahogar”. Saltó y se ahogó.

De eso se trata. Están tratando de entender todo un estudio analítico del mundo material. Eso es muy bueno. Pero si no saben cómo recordar a Nārāyaṇa en el momento de la muerte, entonces tendrán que nacer como perros y gatos, eso es todo. Porque como te gustan tanto los perros. Sobre todo, en occidente, cada caballero, cada dama tiene un perro. Entonces, ¿en qué van a pensar en el momento de la muerte? En un perro. Así es la ley de la naturaleza. Yaṁ yaṁ vāpi smaran bhāvaṁ tyajaty ante kalevaram (BG 8.6). Eso lo encontraran en el Bhagavad-gītā. En el momento de la muerte, la condición mental que has creado te llevará al siguiente cuerpo. Por eso, no te crees una mentalidad perruna. Hazla consciente de Kṛṣṇa. Y eso está muy bien. Porque entonces, en el momento de la muerte, recordaras a Kṛṣṇa y serás transferido a Kṛṣṇaloka. Eso es lo que aquí se explica: etāvān sāṅkhya-yogābhyām. Por eso, se nos aconseja: “Seas lo que seas, no importa. Practica la conciencia de Kṛṣṇa. Eso te salvará”. De lo contrario… janma-lābhaḥ paraḥ puṁān. Janma-lābhaḥ paraḥ puṁsām ante (SB 2.1.6).

Este janma-lābhaḥ paraḥ. Janma-lābhaḥ. Janma-lābhaḥ significa obtener un determinado tipo de nacimiento. Hay diferentes tipos de nacimiento. Los supuestos científicos, físicos, no saben por qué hay tantas formas de vida distintas. ¿Por qué no somos todos seres humanos? ¿Por qué hay gatos, y perros, hay ratas, hay moscas y hay serpientes, hay árboles, hay enredaderas, hay peces, hay tantas, hay 8.400.000 especies de vida? Y todos ellos también nacen de un padre y una madre. Tanto los insectos o los gatos, los perros o los seres humanos, el proceso de nacer es el mismo, padre y madre, dondequiera que vayas. Por eso, un poeta vaiṣṇava dice en una canción:

janame janame sabe pitā-mātā pāya
kṛṣṇa guru nahi mile bhaja hari ei
(Prema-vivarta)

En todas las formas de vía, ya sea que nazcas como hombre, como gato, como perro o como insecto, como lo que sea, siempre hay padre, madre. Tendrás padre, tendrás madre en todas las formas de vida, pero no en todas tendrás guru y Kṛṣṇa.

Por eso, esta vida es para encontrar al guru y a Kṛṣṇa. Padre y madre ya tienes, todos tenemos. Incluso si naces como serpiente tienes padre y tienes madre. Esa es la forma de nacer. Por eso, janmanā jāyate śūdraḥ. Incluso en la sociedad humana, todos nacemos śūdras. Saṁskārād bhaved dvijaḥ. Necesitamos un segundo nacimiento, mediante saṁskāra. Así damos el segundo nacimiento, la iniciación. En el segundo nacimiento, el padre es el maestro espiritual y la madre son los Vedas. El primer nacimiento lo llevan a cabo el padre y la madre materiales, de manera similar, el segundo nacimiento, dvija, es posible mediante el padre, que es el maestro espiritual, y el conocimiento védico, que es la madre. Este padre y esa madre. Eso es lo que necesitamos. Y eso es posible en la forma humana de vida. Un gato nace de padre y madre, tú también naces de padre… pero el gato, o el perro no están capacitados para tener el segundo padre y la segunda madre. No puede ser.

Entonces, si no tomamos el privilegio de aceptar al segundo padre y la segunda madre, ¿cuál es la diferencia entre tu nacimiento y el nacimiento del perro? Eso es lo que aquí se afirma: janma-lābhaḥ paraḥ puṁsām. Tienes este cuerpo la forma de vida humana, es el mejor cuerpo. Esa es la enseñanza de todas las escrituras védicas, simplemente hacen énfasis en eso. Pero, ¿qué significa toda esta civilización material? No es más que trabajar como perros y gatos. Dedicarse únicamente a esas mismas actividades comer, dormir, tener relaciones sexuales y defenderse. Hay muchos edificios en su ciudad, París. ¿Dónde está la cultura que lleva a la perfección de la vida humana? Tienen buenos edificios. Eso es inteligencia. Tantos edificios bonitos. Que la gente viene a ver. Pero eso no es todo. Si simplemente utilizas tu inteligencia… ciertamente tienes inteligencia. Pero si utilizas tu inteligencia simplemente para las actividades materiales, entonces no eres inteligente; eres un necio.

Eso se explica aquí. Janma-lābhaḥ paraḥ puṁsām. Debes establecer una institución cultural donde la gente pueda educarse en cómo recordar a Nārāyaṇa en el momento de la muerte. Eso es lo que se necesita. De no ser así es inútil. ¿De qué vale? Pierdes tanto tiempo en construir una casa muy bonita, pero en el momento de la muerte, no puedes recordar a Nārāyaṇa; te acuerdas de tu muy querido amigo, el perro. ¿De qué sirve? ¿Cuál es el valor? No entienden esto, que hay vida después de la muerte. Dehino 'smin yathā dehe kaumāraṁ yauvanaṁ jarā, tathā dehāntara-prāptiḥ (BG 2.13): “A medida que vas cambiando tu cuerpo de la niñez a la juventud, de la juventud…” Es una filosofía muy sencilla. Los sinvergüenzas no la entienden. Estoy cambiando mi cuerpo. Puedes llamarlo crecimiento o… pero hay un cambio. Yo tenía un cuerpo de niño; ese cuerpo era distinto de mi cuerpo actual. Ha cambiado. Por lo tanto, ya he cambiado mi cuerpo de tantas maneras, tantas veces. Y cambio mi cuerpo después de que este cuerpo ya no sea útil. Así ocurre. Deja de ser útil. Eso es el… el ejemplo que se da: me pongo este suéter, pero cuando se rompe, ya no sirve, lo tiro. Me pongo otro, uno nuevo. Vāsāṁsi jīrṇāni yathā vihāya navāni gṛhṇāti tatah 'parāṇi (BG 2.22). Todo se explica claramente. Esto no es más que una vestimenta. Este cuerpo es un vestido. Por eso, no damos la menor importancia a esta vestimenta corporal; sino que ponemos la atención en el alma. No hacemos diferencias de que, “Este es un vestido hindú, un vestido musulmán, un vestido cristiano, un vestido negro, un vestido blanco”. No, no, no tenemos nada que ver con el vestido. Tenemos que ver con el alma que está dentro del vestido. Él es parte integral de Kṛṣṇa. Ha olvidado a Kṛṣṇa; por lo tanto, está sufriendo. Por lo tanto, nuestro movimiento consiste en revivir su conciencia de Kṛṣṇa e ir de regreso al hogar, de vuelta a Dios. Eso es el movimiento para la conciencia de Kṛṣṇa, ante nārāyaṇa-smṛtiḥ.

Por eso es muy importante el movimiento. Las personas más inteligentes, pueden seguirlo. O seas inteligente o no seas inteligente, pero si por lo menos, eres piadoso, y no puedes seguir este movimiento. Pero de una u otra forma, si de alguna manera participas en este movimiento, entonces tu valiosa vida es un éxito. Janma-lābhaḥ paraḥ puṁsām. No es como una vida de perros y gatos. Es la forma humana de vida… utilízala correctamente. Utiliza los medios apropiados para volverte consciente de Kṛṣṇa, no consciente del perro, o consciente del gato o cualquier otro tipo de conciencia…no. Esto no te va a servir. Consciente de Kṛṣṇa. Entonces podrás recordar a Kṛṣṇa en el momento de la muerte, y habrás utilizado debidamente tu valiosa vida humana. Janma-lābhaḥ paraḥ puṁsām. Tienen un cuerpo muy bueno y valioso, pero será utilizado adecuadamente si aprenden a recordar a Nārāyaṇa en el momento de la muerte.

Muchas gracias.

Devotos: Jaya Śrīla Prabhupāda. (fin)