ES/CC Madhya 19.152


Su Divina Gracia A. C. Bhaktivedanta Swami Prabhupada


TEXTO 152

mālī hañā kare sei bīja āropaṇa
śravaṇa-kīrtana-jale karaye secana


PALABRA POR PALABRA

mālī hañā — haciendo de jardinero; kare — hace; sei — esa; bīja — la semilla del servicio devocional; āropaṇa — sembrar; śravaṇa — de escuchar; kīrtana — de cantar; jale — con el agua; karaye — hace; secana — rociar.


TRADUCCIÓN

«La persona que recibe la semilla del servicio devocional debe cuidar de ella sembrándola en el corazón y haciendo de jardinero. Si la va regando con el proceso de śravaṇa y kīrtana [escuchar y cantar], la semilla comenzará a germinar.


SIGNIFICADO

Vivir con devotos o vivir en un templo significa estar en contacto con el proceso de śravaṇa-kīrtana. A veces, los devotos neófitos piensan que pueden seguir adelante con el proceso de śravaṇa-kīrtana sin adorar a la Deidad, pero esa práctica de śravaṇa-kīrtana es para devotos muy avanzados, como Haridāsa Ṭhākura, que se ocupaba en el proceso de śravaṇa-kīrtana sin adorar a la Deidad. Sin embargo, no hay que hacer falsas imitaciones de Haridāsa Ṭhākura y dejar de lado la adoración de la Deidad para tratar de ocuparse en śravaṇa-kīrtana. Eso no está al alcance de los devotos neófitos.

La palabra guru-prasāda indica que el maestro espiritual es muy misericordioso al conceder al discípulo el don del servicio devocional. Ése es el insuperable regalo que el maestro espiritual puede ofrecer. Quienes han vivido una vida piadosa son candidatos para recibir el beneficio supremo de la vida, y, para conceder ese beneficio, la Suprema Personalidad de Dios envía a Su representante a impartir Su misericordia. Dotado con la misericordia de la Suprema Personalidad de Dios, el maestro espiritual lleva esa misericordia a quienes son elevados y piadosos. Así, el maestro espiritual enseña a sus discípulos a ofrecer servicio devocional a la Suprema Personalidad de Dios. Eso se denomina guru-kṛpā. Kṛṣṇa-prasāda, la misericordia de Kṛṣṇa, consiste en que Él envía un maestro espiritual genuino al discípulo que lo merece. Por la misericordia de Kṛṣṇa, el alma condicionada encuentra al maestro espiritual genuino, y, por la misericordia del maestro espiritual, el discípulo adquiere una formación completa en el servicio devocional del Señor.

Bhakti-latā-bīja significa «la semilla del servicio devocional». Todo tiene una causa original, una semilla. Para toda idea, programa, plan o dispositivo, es necesario en primer lugar meditar en ese plan; eso es lo que se llama bīja, la semilla. Los métodos, reglas y regulaciones mediante los cuales adquirimos una formación perfecta en el servicio devocional forman la bhakti-latā-bīja, la semilla del servicio devocional. Esa bhakti-latā-bīja se recibe del maestro espiritual por la gracia de Kṛṣṇa. Hay otras semillas, llamadas anyābhilāṣa-bījas, entre las que se encuentran la karma-bīja y la jñāna-bīja. Quien no sea lo bastante afortunado para recibir la bhakti-latā-bīja de parte del maestro espiritual, cultivará en cambio semillas como la karma-bīja, la jñāna-bīja, o las bījas política, social o filantrópica. La bhakti-latā-bīja, sin embargo, es diferente de esas otras bījas sólo se puede recibir por la misericordia del maestro espiritual. Para recibir la bhakti-latā-bīja es, pues, necesario, satisfacer al maestro espiritual (yasya prasādad bhagavat-prasādaḥ). La bhakti-latā-bīja es el origen del servicio devocional. Si no se satisface al maestro espiritual, se obtiene la bīja, la causa originaria, del karma, del jñāna o del yoga, sin el beneficio del servicio devocional. Pero la persona fiel a su maestro espiritual obtendrá la bhakti-latā-bīja. Esa bhakti-latā-bīja se recibe cuando el maestro espiritual da la iniciación. Tras recibir la misericordia del maestro espiritual, se deben repetir sus enseñanzas, y eso es lo que se denomina śravaṇa-kīrtana, escuchar y cantar. Quien no ha escuchado debidamente de labios del maestro espiritual, o quien no sigue los principios regulativos, no está capacitado para cantar (kīrtana). Así lo explica el Bhagavad-gītā (2.41): vyavasāyātmikā buddhir ekeha kuru-nandana. Quien no ha escuchado con atención las instrucciones del maestro espiritual no está capacitado para cantar o predicar el servicio devocional. Después de recibir instrucciones del maestro espiritual, es necesario regar la bhakti-latā-bīja.