ES/SB 4.31.1


Su Divina Gracia A. C. Bhaktivedanta Swami Prabhupada


TEXTO 1

maitreya uvāca
tata utpanna-vijñānā
āśv adhokṣaja-bhāṣitam
smaranta ātmaje bhāryāṁ
visṛjya prāvrajan gṛhāt


PALABRA POR PALABRA

maitreyaḥ uvāca—Maitreya dijo; tataḥ—a continuación; utpanna—adquirieron; vijñānāḥ—poseer conocimiento perfecto; āśu—muy pronto; adhokṣaja—por la Suprema Personalidad de Dios; bhāṣitam—que fue expuesto; smarantaḥ—recordar; ātma-je—a su hijo; bhāryām—su esposa; visṛjya—después de dar; prāvrajan—se fueron; gṛhāt—del hogar.


TRADUCCIÓN

El gran sabio Maitreya continuó: A partir de entonces, los Pracetās vivieron en el hogar durante miles de años, y cultivaron conocimiento perfecto en un estado espiritual de conciencia. Finalmente recordaron las bendiciones de la Suprema Personalidad de Dios y abandonaron el hogar, dejando a su esposa en manos de su perfecto hijo.


SIGNIFICADO

Después de completar sus penitencias, los Pracetās recibieron las bendiciones de la Suprema Personalidad de Dios. El Señor les bendijo diciéndoles que, una vez finalizada su vida familiar, a su debido tiempo regresarían al hogar, de vuelta a Dios. Cuando completaron la etapa de vida familiar, que duró miles de años de los semidioses, los Pracetās decidieron abandonar el hogar, dejando a su esposa bajo la protección de su hijo Dakṣa. Ese es el proceder que se sigue en la civilización védica. Al principio de la vida, el brahmacārī tiene que someterse a rigurosas penitencias y austeridades a fin de educarse en los valores espirituales. Al brahmacārī, el estudiante, nunca se le permite relacionarse con mujeres, ni aprender acerca del disfrute sexual desde el principio de la vida. El principal error de la civilización actual es la libertad que se da a los jóvenes en los colegios y universidades para disfrutar de la vida sexual. La mayor parte de los hijos son varṇa-saṅkara, es decir, «nacidos de padres indeseables». Debido a ello, el mundo entero se hunde en el caos. En realidad, la civilización humana debe estar basada en los principios védicos. Esto significa que, al principio de la vida, los jóvenes y las muchachas deben someterse a penitencias y austeridades. Cuando crezcan, deben casarse, vivir en el hogar durante un tiempo, y tener hijos. Y cuando esos hijos lleguen a la edad adulta, el hombre debe abandonar el hogar y tratar de volverse consciente de Kṛṣṇa. De este modo podemos lograr la perfección de la vida y regresar al hogar, al reino de Dios.

Sin la práctica de austeridades y penitencias durante la vida de estudiante, no podemos entender la existencia de Dios. Sin comprender a Kṛṣṇa, no podemos lograr la perfección de la vida. La conclusión es que cuando los hijos llegan a la edad adulta, la esposa debe quedar bajo su tutela. El esposo puede entonces abandonar el hogar para dedicarse al cultivo de conciencia de Kṛṣṇa. Todo depende de haber madurado en el cultivo de conocimiento. El rey Prācīnabarhiṣat, el padre de los Pracetās, abandonó el hogar antes del regreso de sus hijos, que estaban realizando austeridades bajo el agua. Cuando sea el momento adecuado, cuando hayamos adquirido un nivel perfecto de conciencia de Kṛṣṇa, debemos abandonar el hogar, aun en el caso de que no hayamos completado todavía todos nuestros deberes. Prācīnabarhiṣat estaba esperando la llegada de sus hijos, pero, conforme a las instrucciones de Nārada, tan pronto como alcanzó el nivel de inteligencia adecuado, simplemente dejó instrucciones a sus ministros para que las transmitiesen a sus hijos, y sin esperar a que regresara, abandonó el hogar.

Es absolutamente necesario que los seres humanos abandonen las comodidades de la vida en el hogar, tal como aconseja Prahlāda Mahārāja: hitvātma-pātaṁ gṛham andha-kūpam: Para poner fin al modo de vida materialista, es necesario abandonar la supuesta comodidad de la vida en el hogar, que no es más que un medio de dar muerte al alma (ātma-pātam). El hogar se considera un pozo oculto cubierto de hierba; quien cae en ese pozo, simplemente muere sin que nadie le ayude. Por lo tanto, no hay que apegarse demasiado a la vida familiar, pues ese apego arruinará el progreso en el sendero de conciencia de Kṛṣṇa.